LA
COMUNICACIÓN
Siempre que me comunico, quiero
contar algo, es decir, tengo un objetivo por el cuál necesito transmitir una
información concreta.
Nos comunicamos cuando queremos,
y si no queremos no lo hacemos.
Una comunicación eficaz es se suele definir como aquella que, en todos sus elementos
(emisor, receptor, mensaje, canal, etc.), responde a una comunicación que no da
lugar a posibles interpretaciones contradictorias o incompletas.
Un buen comunicador es aquel que
consigue que la gente haga lo que él quiere.
Tendemos a pensar que nos
comunicamos bien con la gente que pensamos que es “normal”, es por eso que no
estamos bien preparados puesto que no sabemos cómo comunicarnos con gente que
no es como nosotros y que calificamos como “raro”. Para decir que estamos bien
preparados para comunicarnos es importante saber comunicarte con todo tipo de
personas y ser capaces no solo de transmitir la información a las personas sino
transcender y hacer que entienda la información y quiera hacerlo.
La clave de una buena
comunicación pasa por una buena planificación, usando la retroalimentación y el
estilo asertivo.
Para preparar un proceso de
comunicación es necesario identificar los
elementos que intervienen en la comunicación, que son:
1-EMISOR: persona que emite el
mensaje.
2-RECEPTOR: persona que recibe el
mensaje y que ha de ser capaz de descodificarle.
3-MENSAJE: corresponde a la
información que se quiere transmitir.
4-CANAL: el medio por el cual se
transfiere el mensaje (telf., carta, etc.).
5-CODIGO: conjunto de señales o signos que forman
el mensaje.
ESTILOS DE COMUNICCIÓN
1)
AGRESIVO: es aquella persona
que a la hora de comunicarse no es capaz de comunicarse con todo tipo de
personas.
2)
PASIVO: es una persona
totalmente contraria al agresivo, pero tampoco sabe comunicarse con todo tipo
de personas.
3) ASERTIVO: es un persona que comunicándose no se antepone a los demás pero, que tampoco deja que los demás se antepongan ante él. Es una media entre los otros dos estilos y por lo tanto es capaz de comunicarse tanto con agresivos, como con pasivos y, obviamente, con asertivos.
Por lo tanto para comunicarse eficazmente es
recomendable e imprescindible ser una
persona asertiva.
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